El próximo ejercicio será un año importante en materia de legislación de impuestos, dado que se van a modificar dos de las le leyes más importantes que existen en materia tributaria dentro de los impuestos directos.
Los cambios previstos afectarán a la Ley del IRPF y a la ley del Impuesto de Sociedades. Estas leyes vigentes desde 2006 y 2004 respectivamente se van a rehacer por completo. El Anteproyecto de Ley (borrador) está circulando entre los técnicos del Ministerio de Economía, el Foro Tributario de Grandes Empresas y las principales asociaciones especializadas en materia fiscal y contable. Estos cambios están previstos que entren en vigor a partir del 2015.
El actual ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro ya anunció en una entrevista en El País, que estos cambios van a redefinir el concepto de base imponible. Los nuevos tramos impositivos que se alteran de manera profunda y se recalcularán todas las deducciones y bonificaciones que afectan tanto a sociedades como al IRPF.
Actualmente tenemos dos leyes fiscales que tienen demasiados parches. Con solo ver que la propia ley del IRPF tiene 38 disposiciones adicionales y 26 disposiciones transitorias, síntoma de agregados y modificaciones posteriores cada año. Por otra parte, la Ley de Sociedades es un refundido de leyes que se remontan al 1995, la primera de ellas y que no ha parado de modificarse hasta la fecha de hoy.
El objetivo de esta reforma es avanzar en términos de eficacia equidad y neutralidad, sin dejar de atender el principio de suficiencia. El efecto de tales modificaciones permitirá una reducción generalizada de la carga impositiva soportada por los contribuyentes de este impuesto, que será especialmente significativa para los perceptores de rendimientos de trabajo o de actividades económicas.
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